Op (19-02-12).- Tras la emisión de diez leyes que protegen a una mínima parte de la amplia riqueza cultural y folklórica de Bolivia, el Ministerio de Culturas asegura que hoy se debe trabajar en la promoción de las danzas.
El responsable de Festividades del Ministerio de Culturas, Javier Escalier, señaló que se está trabajando en una segunda fase para proteger las danzas que son patrimonio de nuestro país.
Esa fase consiste en realizar la promoción de las danzas a través de diferentes medios y afrontar acciones más contundentes para poder defender a nuestro país del plagio que ha venido sufriendo desde hace años y que, incluso, ha generado cruces diplomáticos.
“Por el momento queremos hacer una pausa en la declaratoria de danzas como patrimonio, no vale la pena hacerlo si no hay acciones para defendernos. Vamos a ingresar a una segunda fase para hacer la promoción de las danzas que ya están protegidas para que sean reconocidas internacionalmente”, dijo.
La exministra de Culturas, Zulma Yugar, coincide en la necesidad de fortalecer la promoción de las danzas.
“Por ejemplo, nadie prohíbe que el tango sea bailado en otros países, pero lo que todo el mundo sabe que es que esta danza pertenece a la Argentina. En ese marco, nosotros queremos que de esa manera también haya el respeto a la moral y al origen de nuestras danzas”, dijo.
Por otra parte, Yugar, que fue elegida junto con 12 personas de todo el mundo como jurado de la UNESCO, indicó que nuestro país está atrasado en realizar las presentaciones a este organismo que recibe postulaciones para patrimonios cada dos años.
Para la cantante de “Piel Morena”, en Bolivia no solamente existen danzas que deben ser declaradas patrimonio de la humanidad, sino otras festividades y culturas que corren el riesgo de desaparecer.
“Es necesario que las autoridades municipales y departamentales se organicen para poder presentar la documentación a la UNESCO para otro tipo de declaratorias. No solamente el Gobierno tiene la facultad de hacerlo, todos pueden realizar las postulaciones”, dijo Yugar, quien es reconocida por su canto como la Embajadora de la canción boliviana.
Las Leyes
Son diez en total las danzas bolivianas que cuentan con una ley que las declara Patrimonio Histórico e Inmaterial del Estado de Bolivia.
A partir de la gestión pasada el Gobierno a través del Ministerio de Culturas comenzó a emitir leyes para proteger estas expresiones culturales.
En una sola fecha; 14 de junio del 2011, la Kullawada, Morenada, Caporales, Llamerada y la Saya Afroboliviana fueron declaradas Patrimonio Histórico e Inmaterial de Bolivia.
La Ley Nº 134 fue la primera norma de este tipo en emitirse y declarar Patrimonio Cultural e Inmaterial del Estado Plurinacional de Bolivia a la danza la Morenada; la Ley Nº 135 hace lo mismo con la danza de la Llamerada, la Ley Nº 136 con la Kullawada, la Ley Nº 137 con la danza de los Caporales y la Ley Nº 138 con la expresión cultural artística de la Saya Afroboliviana, de los Yungas de La Paz.
La promulgación de estas cinco leyes dio inicio a una catalogación de las danzas que forman parte de un plan de salvaguarda.
Otra de las danzas que recibió este reconocimiento ante las constantes amenazas de apropiación de países como Perú y Chile fue la Diablada.
La Ley 149 del 11 de julio del 2011 declaró a la Diablada Patrimonio Histórico e Inmaterial del Estado. La medida fue asumida por iniciativa del gobierno de Evo Morales como parte de una estrategia gubernamental para posibilitar la defensa del patrimonio a nivel nacional e internacional.
El 14 de octubre de 2011, la danza de los Jalq’as -originaria de Potosí- también fue declarada Patrimonio Histórico e Inmaterial con la Ley Nº 178.
La danza de los Ch’utas proveniente de Choqueyapu que es el río que cruza por la ciudad de La Paz y es base para la denominación a los habitantes como “Ch´utas”, también forma parte del Patrimonio a través de la ley que fue promulgada en octubre del 2011.
Además de estas danzas, el Taquirari y la Chovena son también Patrimonio Histórico e Inmaterial del Estado Plurinacional de Bolivia.
Estas danzas, que provienen del oriente del país (Santa Cruz, Beni, Pando), cuentan con una normativa que fue aprobada en la Cámara de Diputados y Senadores y promulgada por el presidente Evo Morales, en diciembre de 2011.
Antes que todas estas declaraciones nacionales se hagan, el 2001 la UNESCO proclamó al Carnaval de Oruro como "Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad".
Esta declaración reconoce a la Diablada como el icono de la festividad religiosa, que además cuenta con la participación de más de 50 fraternidades con bailes de diversas regiones del país.
Fuente: Opinion