El planteamiento surge a días de conocerse la readmisión de Bolivia a la Convención de Estupefacientes de las Naciones Unidas con la reserva del acullico de la hoja milenaria.
"Es coherente el hablar de una ley de la hoja de coca, porque una cosa es la hoja de coca y otra cosa es el narcotráfico. Pero eso no se puede confundir con la discusión respecto de la necesidad de revalorar la hoja de coca a partir de la aceptación de esta clausura de reserva", indicó en declaraciones a los medios.
Mendoza detalló que la ley de la hoja de coca debe partir del principio definido por la Constitución Política del Estado, de que la hoja de coca es considerada no solamente como un recurso natural, sino al mismo tiempo como un valor histórico, cultural y ancestral de las naciones y pueblos que habitaron este país antes de la colonia.
"La ley de la hoja de coca, debería entonces vincularse a su carácter como valor histórico, cultural, por tanto pensar en el valor simbólico, en el valor cultural, pensar, pero además, en el valor yo diría ligado a las estrategias de salud en nuestro país", agregó.
Respecto a la Ley 1008 de Régimen de la Coca y Sustancias Controladas, dijo que es necesario "ajustar" esa norma, para incorporar algunos elementos que coadyuven de mejor manera en una estrategia de lucha contra el narcotráfico.
"El contenido referido a narcotráfico, de la Ley 1008, deberá discutirse, pero además profundizarse, porque la estrategia de lucha contra el narcotráfico ha variado en el país y es necesario ajustar esa norma. La Ley 1008 y la incorporación de algunos elementos, distintos que coadyuven de mejor manera en una estrategia de lucha contra el narcotráfico, debe de ser una discusión que además contemple lo que ocurre a nivel continental y a nivel internacional", sostuvo.
Fuente: ABI
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