“Estamos solicitando la investigación de estos dos casos (…) que atentan la integridad física de las personas”, el de la enfermera Leonor Boyán (acusada por agresión física al viceministro de Régimen Interior y Policía, Jorge Pérez) y el del Anestesiólogo Jorge Molina (quien presenta una parálisis de todo el lado izquierdo del cuerpo), producto de las medidas de protesta del sector en salud y estudiantes de medicina.
El propio viceministro Pérez desmintió que la enfermera Boyán, internada en el Hospital del Tórax, hubiera sido torturada y golpeada, además de aclarar que su salud es estable y que su vida no corre peligro, tal como informaron algunos medios periodísticos.
Al respecto, el director Nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Jorge Toro, aseguró el lunes que la enfermera no fue torturada en instalaciones policiales. Coincidentemente, el representante del Defensor del Pueblo, Álvaro Flores, aseguró que en su visita a Boyán no evidenció los golpes denunciados por la trabajadora, por lo que se solicitó la copia del informe del médico forense, que ratifica que Boyán solo cuenta con marcas en los brazos producto de su resistencia a la detención.
El último acontecimiento violento registrado este miércoles al mediodía, cuando estudiantes de medicina y médicos lanzaron con violencia petardos y canicas a los efectivos policiales que resguardan el Ministerio de Salud. El saldo fue la afección física de tres efectivos policiales y dos trabajadores de medios de comunicación resultaron heridos.
Fuente: Prensa Senado