Efraín Fernández, director de Calidad Ambiental del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz (GAMLP) develó que es necesario que, no solamente los colegios y escuelas sean los encargados de inculcar este tipo de cultura de reciclaje y re utilización a los estudiantes, ya que al denominarse programas integrales es necesario que desde los establecimientos, hogar y trabajos puedan ser partícipes todos los miembros de la familia como los funcionarios de cada institución.
Es evidente que existe necesidad de inculcar la cultura de clasificar y separar los residuos en el país, sin embargo hay varias organizaciones que expresan su necesidad en la gestión de basura desde su inicio, justamente para reducir la generación de desperdicio y, si es posible, ampliar la vida útil de los rellenos sanitarios.
Fernández destacó que de nada sirve enseñar a los niños en las escuelas y colegios que aprendan a reciclar o reutilizar la basura si en el mismo hogar no se aplica lo difundido, es por esa razón que la coordinación entre municipios y gobernaciones es importante para reducir la generación diaria de toneladas de basura.
Lo primordial es que la ciudadanía aprenda a clasificar los residuos y después a reciclar, este acto se convierte en un verdadero potencial económico para los recolectores y las mismas industrias, que si se saben administrar y trabajar adecuadamente, los ingresos anuales crecen sorprendentemente.
El Programa Urbano de la Unión Nacional de Instituciones para el Trabajo de Acción Social (Unitas) en varias investigaciones destaca que en el país no se clasifica la basura, no se la procesa y menos se la recicla. A ello se suma la falta de cumplimiento de las normas establecidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para la gestión de residuos sanitarios en todas las regiones.
Muchas personas desconocen lo que se debe hacer con la basura, no saben cómo seleccionar los desechos, básicamente hacer a un lado los orgánicos y los inorgánicos y cómo tratar en el mismo hogar los residuos peligrosos como las pilas, concluyó.
¿Cómo reciclar?
Un reciclaje bien entendido debería llevar a los hogares a tener 7 cubos de basura:
- Basura orgánica: peladuras de fruta y verduras, restos de comida (carne o pescado), plantas o césped, así como restos humanos (cabello, uñas, etc.).
- Metal: las latas de refrescos o con verdura envasada, como aceitunas o maíz.
- Papel y cartón: facturas, sobres, cajas de cereales, cuadernos y libros (retirándoles la parte de plástico de las tapas).
- Plásticos: las bolsas donde se envasa la pasta, el arroz o las legumbres, los vasitos de yogur y las bolsas de la compra.
- Vidrio: todas las botellas de alcohol, zumos, leche fresca, y envases, como de tomate frito. Por supuesto, sin sus tapas que suelen ser de plástico.
- Tetrabrik: en muchas casas lo meten en el reciclaje del papel, pero no es sólo cartón. Por ello, se considera un residuo aparte. Aquí estarían los envases de leche, nata, purés, etc.
- Basura con varios componentes. Existen muchos residuos que están hechos de varios materiales y son difíciles de descomponer. Por ejemplo, una bombilla, los residuos sanitarios, etc.
Las pilas y los medicamentos cuentan con "puntos limpios" en farmacias, tiendas de fotografía o junto a contenedores variados.
Fuente: Gaia Noticias