LR (4-04-12).- El país cuenta ahora con un nuevo equipo climatológico, cuyo principal objetivo es estudiar la influencia de los aerosoles y cuantificar el impacto que tienen en el derretimiento de los glaciares, explicó Francesco Zaratti, director del Laboratorio de Física de la Atmósfera (LFA) de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) de la ciudad de La Paz.
“Con esta estación podremos observar a detalle los impactos que tienen los aerosoles que vienen del Amazonas, cuando hay quemas o chaqueos, y la cuantificación de esto nos dirá si el derretimiento de los glaciares tiene un componente, razón o causa debido a los incendios forestales”, expresó.
Asimismo, explicó que los aerosoles son partículas suspendidas en la atmósfera que no son otra cosa que cenizas, polvo u otros residuos provenientes de la quema de la vegetación. Todas éstas son transportadas por el viento hasta las alturas y llegan a depositarse sobre los glaciares, que se oscurecen cuando ocurre este proceso.
Otra de las utilidades está enfocada en los datos climatológicos de la estación, que ayudarán a mejorar los modelos de análisis climáticos de la región —porque se podrán hacer previsiones hasta 30 años más adelante— y en la formación de recursos humanos en ciencias atmosféricas.
Acto
La nueva estación inició sus operaciones en 2011, tras renovar su infraestructura de la cumbre con un nuevo equipo meteorológico. Los instrumentos fueron instalados en diciembre. Sin embargo, su inauguración oficial fue ayer en el mismo monte de Chacaltaya, ubicado a 5.240 metros sobre el nivel del mar (msnm). El acto contó con la presencia de los representantes de los laboratorios extranjeros que forman parte del consorcio del flamante equipo y autoridades universitarias.
En la oportunidad, la rectora de la UMSA, Teresa Rescala, resaltó el trabajo del laboratorio universitario, de los ingenieros y el personal que realizará turnos para recabar los datos y cuidar el buen funcionamiento de la estación. La autoridad agradeció la ayuda externa.
Costos del equipo
La universidad estatal contribuyó con un fondo de casi $us 200 mil del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), monto que asegura el funcionamiento de la estación durante los próximos dos años.
Un total de $us 662 mil fue invertido en instrumentos científicos de última generación para Chacaltaya y el sistema LIDAR, que está ubicado en instalaciones de Cota Cota.
Un acelerado retroceso
El retroceso de los glaciares es inevitable porque la mayoría son pequeños o medianos y su tamaño hace que sean más vulnerables al cambio climático, dijo Zaratti. “Un glaciar vive porque se alimenta de las lluvias. Si llueve menos no crece y empieza a disminuir; si aumenta la temperatura también disminuye; lo mismo pasa si la gente corta su hielo, si se construyen ciudades cerca de los glaciares, se produce el derretimiento”, dijo.
El físico señaló que la principal fuente de agua para La Paz y El Alto son las lluvias; sin embargo, aclaró que un porcentaje proviene de los glaciares, que también sirven de reservas. Por ello, resaltó la importancia de preservarlos y crear conciencia en las autoridades para adoptar medidas.
Fuente: La Razon