Durante el acto oficial, el ministro de Hidrocarburos y Energía, Juan José Sosa, explicó que el aporte de este proyecto de 82 megavatios representa la demanda total de energía de Tarija y Sucre. “Sólo para que tengan una idea de cuál es el potencial del proyecto”, aseveró.
El proyecto recibe el nombre de ciclo combinado porque la generación de electricidad se da a través de la mezcla de gas y vapor, primera experiencia en el país. Según Sosa, para los siguientes años se tiene prevista una inversión de $us 656 millones orientada a la generación de 550 MW adicionales a través de diferentes proyectos.
La autoridad manifestó que con el propósito de garantizar el suministro de energía en Bolivia, la Empresa Nacional de Electricidad (Ende), desde 2010, cuando se recuperó el sector hasta entonces administrado por empresas extranjeras, invirtió $us 385 millones en materia de generación eléctrica.
De acuerdo con el gerente de Ende, Hugo Villarroel, el haber puesto en marcha el proyecto de ciclo combinado representa una respuesta contundente a muchos augurios que “pretendieron hacer ver que la nacionalización fue inoportuna”.
Afirmó que cuando el Estado se hizo cargo de la empresa Guaracachi, la encontró con facturas impagas por el suministro de gas, entre otras deficiencias de gestión, lo que ponía en riesgo la existencia de la compañía, “pero aún más grave, el suministro de energía en Bolivia”.
Desarrollo
En tanto, el Jefe del Estado hizo referencia a la política de privatización y capitalización de las empresas nacionales y enajenación de los recursos naturales. Manifestó que con el argumento de que “Bolivia se nos muere”, anteriores gobiernos entregaron a capitales extranjeros todos los bienes de Bolivia.
Frente a esta situación, dijo que en siete años de su gobierno se logró recuperar empresas como Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), consolidar nuevas compañías como Boliviana de Aviación (BoA). “Hemos demostrado que los bolivianos sabemos administrar nuestras empresas”, indicó.
Morales consideró que lo más importante es garantizar alimentos, electricidad y agua a la población, y que haya movimiento económico, lo que se está logrando —señaló— a través de diferentes proyectos. Por lo demás, agregó, sólo hay conflictos sociales por solucionar.
Fuente: La Razon
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